Durante nuestra vida cotidiana nos encontramos con situaciones en las que lo correcto y lo incorrecto no esta tan bien definido como decir negro y blanco, más bien son una escala de grises donde el contexto nos podría dictar que tan cerca se está de la zona blanca o de la negra, sin llegar a ser en su totalidad ninguna de ellas. Un ejemplo muy sencillo de lo anterior es el hecho de no hacer el alto cuando el semáforo está en rojo, en este punto casi todos coincidiríamos en que es algo incorrecto, por otro lado si viene una ambulancia detrás de ti, el hecho de pasarse el rojo ya no se considera incorrecto, por el contrario, lo incorrecto seria no avanzar.
Pero el contexto no es lo único que determina que tan correcto o incorrecto es una acción, ya que esta también se ve influida por la valoración que nosotros mismos le demos a la situación, y son este tipo de valoraciones lo que diferencian el accionar de una persona o de otra. Regresando al semáforo en rojo, si vas tarde a alguna reunión, puede que le des más importancia al hecho de llegar a la reunión que respetar el reglamento de tránsito, entonces nos podríamos encontrar con gente que no duda en pasarse el rojo, mientras que por otro lado habrá gente que bajo la misma situación, respete el reglamento y se espere a que el semáforo cambie a verde.
Y todo esto salió de una simple intersección con un semáforo en rojo, ahora, imagínense el sinfín de situaciones similares a esta que nos encontramos día con día. Por lo tal es importante tener un código de ética en base al cuál poder actuar, un código es un “conjunto de reglas o preceptos sobre cualquier materia” (RAE) mientras que “la ética es la encargada de discutir y fundamentar reflexivamente ese conjunto de principios o normas que constituyen nuestra moral” (SEP) por lo cual, un código de ética fija las normas que regulan el comportamiento de las personas -aunque también es aplicable a empresas u organizaciones, solo nos enfocaremos en el personal-.
Una forma de construir nuestro propio código de ética, es priorizando los valores mediante los cuales actuamos día con día, y aunque estos valores sean parte de nuestra cultura y de nuestro quehacer diario, es necesario formalizarlos y establecer un marco de referencia que oriente nuestras acciones (FEMSA, 2009) , para así tener en claro nuestras prioridades con respecto a los valores, y saber cómo actuar ante determinadas situaciones, lo que nos lleva al tema de la integridad, la cual, según el diccionario de competencias del Taller de Competencias Personales, significa “[…] que las acciones que emprende sean congruentes con lo que se piensa, se hace y se dice”, es decir, una vez decidido nuestro código de ética personal, debemos de actuar de acorde a él.
En mi opinión, la mejor manera de lograr actuar íntegramente de forma automática, es formándonos el hábito, ya que “el poder de la costumbre es muy pesado” ("Catón", 2011) , entonces, si conscientemente nos formamos el hábito de actuar de acuerdo a nuestro código de ética personal, con el paso del tiempo estas acciones se van a convertir en un hábito, o una costumbre, logrando que actuemos íntegramente aún y sin pensarlo. El problema de la costumbre es que va para ambos lados, es decir, si desde ahorita no hacemos el esfuerzo de comportarnos íntegramente, va a ser muy difícil quitarnos la costumbre más adelante.
Aunque también hay que mencionar que no es nada fácil actuar íntegramente, ya que nos encontramos con que las tentaciones, la presión social, o las salidas fáciles actúan en contra nuestra cuando queremos actuar según nuestro código de ética, y la única herramienta con la que contamos para contrarrestarlas es el nivel de convicción que tengamos en nuestro código de ética, ayudándonos de la reflexión en cada momento para valorar la situación, y así poder actuar de íntegramente.
Bibliografía
"Catón", A. F. (10 de Abril de 2011). El alambrista. El Norte.
FEMSA, G. (Diciembre de 2009). FEMSA código de ética de negocios. Recuperado el 9 de Abril de 2011, de FEMSA: http://files.shareholder.com/downloads/FEMSAS/1219175653x0x37757/3C85A79C-94A3-4947-B400-D67CD73BF042/codeofethics_mx.pdf
SEP. (s.f.). Formación Académica, Ética y Valores. Recuperado el 09 de Abril de 2011, de Secretaría de Educación Pública: https://docs.google.com/viewer?url=http%3A%2F%2Fwww.dgb.sep.gob.mx%2Finformacion_academica%2Fsecuencias_didacticas%2F1sd_eticayvalores_i%2Fmaterial_bloque1%2Fdiferenciaentreeticaymoral.pdf
RAE 22° Edición. (s.f.). Definición de código. Recuperado el Abril 9, 2011, desde http://buscon.rae.es/draeI/SrvltConsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=codigo
Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, Campus Monterrey, Diccionario de Competencias, Taller 1. (s.f). Competencias Personales. Recuperado el 09 de Abril del 2011.
Es muy interesante el tema de codigo de etica, tanto personal como profesional. pero no le dan importancia que realmente merece.
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